Resumen: Predecir cómo será el lenguaje
Instrumentos de predicción temprana del lenguaje en niños con y sin síndrome de Down
Paul J. Yoder y Steven F. Warren
American Journal of Mental Retardation, 109: 285-300, 2004
RESUMEN
Planteamiento y objetivos
Una gran proporción de niños con síndrome de Down muestran unas habilidades de comunicación y lenguaje que son inferiores a lo que se correspondería con su edad mental, mientras que los niños con otros tipos de discapacidad intelectual las suelen tener más ajustadas a su propia edad mental. Y esta diferencia en función de la etiología o causa de la discapacidad tiende a aumentar conforme van creciendo la edad cronológica y la edad mental. Lo cual significa que los niños con síndrome de Down encuentran más obstáculos para alcanzar la comunicación y el lenguaje que los otros con discapacidad debida a otra causa. Si el síndrome de Down influye tanto en el proceso del desarrollo del lenguaje, es posible que los instrumentos capaces de predecir este desarrollo (instrumentos predictores) sean también diferentes de los que se observen en los demás niños con discapacidad.
Al considerar la comunicación prelingüística que ha desarrollado un niño, cabe deducir que, por una parte, es capaz de revelar la facilidad que ese niño tenga para adquirir el lenguaje y, por otra, provoca respuestas por parte de los padres que han de facilitar el lenguaje.
Por eso, entre las variables del niño que pueden servir de instrumentos predictores, deben señalarse las siguientes:
- La comprensión precoz del lenguaje: puede ser el predictor más lógico de lo que ha de ser después la producción lingüística, ya que las palabras se entienden antes de poder ser reproducidas. Y esto suele ocurrir en los niños con desarrollo normal.
- Pero se ha de considerar también la producción comunicativa del niño. En la etapa prelingüística, la producción comunicativa tiene sus propios métodos de comunicación.
- a) Demanda o solicitud: mediante gestos o vocalizaciones en coordinación con la atención hacia el adulto, gestos convencionales, símbolos
b) Comentarios o respuestas comunicativas: también mediante gestos, vocalizaciones o símbolos.
c) Utilización de forma prelingüística: la comunicación vocal canónina – balbuceo, mediante repetición de consonante-vocal: ba-ba-ba, ta-ta-ta, etc. - Una de las razones por las que la comunicación prelingüística va asociada al desarrollo ulterior del lenguaje puede ser porque tienda a evocar una influencia facilitadora a partir de las respuestas que dan los padres, que pueden hacerlo de varias maneras:
- a) nombrando o poniendo palabras a las cosas que el niño hace o señala,
b) realizando de inmediato lo que el niño pide en su comunicación no verbal,
c) imitando las vocalizaciones del niño de manera exacta o ligeramente modificada.
Son todas ellas óptimas respuestas al esfuerzo comunicativo del niño.
El estudio aquí presentado se pregunta:
- Todos estos instrumentos que se acaban de exponer, ¿son capaces de predecir el desarrollo receptivo y productivo del lenguaje en los niños con discapacidad intelectual?
- La etiología de la discapacidad –con o sin síndrome de Down– ¿predice la media y la variabilidad de la capacidad productiva y receptiva del lenguaje?
- ¿Existe una diferencia entre niños discapacitados –con y sin síndrome de Down– en cuanto a la magnitud de la asociación entre instrumentos predictores y el posterior desarrollo de lenguaje?
Métodos y resultados
El estudio se realizó en 39 niños de alrededor de 2 años y medio de edad cronológica y unos 13 meses de edad mental, de los que 17 tenían síndrome de Down y 22 discapacidad intelectual de diversas clases. Se analizaron muy diversos aspectos y variables de la comunicación y del lenguaje, así como las interacciones reales entre el niño y el experimentador y entre el niño y su madre o padre en sesiones recogidas por vídeo. Los análisis se realizaron en dos momentos: el primero de base (tiempo 1), y un segundo 6 meses después (tiempo 2).
Los resultados fueron los siguientes:
- Confirman que los niños con síndrome de Down desarrollan un lenguaje menos variado tanto en su recepción como en su producción, que los niños con discapacidad debida otras causas.
- Son también menos variables ambos tipos de lenguaje en los niños con síndrome de Down, en comparación con el otro grupo. Es decir, hay mayor uniformidad en los resultados obtenidos en el grupo con síndrome de Down.
- Instrumentos predictores de la posterior densidad de léxico fueron: la densidad inicial de léxico previamente conseguida, la etiología de la discapacidad (peor para el síndrome de Down), y el número de respuestas óptimas por parte de los padres.
- Instrumentos predictores del posterior lenguaje receptivo fueron: la intensidad del lenguaje receptivo inicial y la causa de la discapacidad.
- El número de comunicación vocal canónica y el número de comentarios o respuestas comunicativas por parte del niño fueron predictores de la posterior densidad de léxico en los niños con discapacidad no debida al síndrome de Down; pero no fueron buenos predictores del desarrollo de léxico en los que tenían síndrome de Down.
- El número de respuestas óptimas realizadas por parte de los padres resultó ser un buen elemento predictor para el desarrollo posterior del lenguaje, tanto receptivo como productivo.
RESUMEN
El estudio confirma algunos hechos ya conocidos, como son las dificultades intrínsecas que los niños con síndrome de Down tienen para desarrollar su lenguaje receptivo y productivo frente a niños con otras discapacidades intelectuales. La menor memoria a corto plazo de carácter auditivo puede ser una de las causas de este retraso. Pero por encima de todo resalta el valor predictivo que poseen las interacciones verbales y comunicativas que mantengan los padres con su hijo con síndrome de Down. Téngase presente que el período de tiempo elegido fue de sólo 6 meses; aun así se pudo comprobar el valor positivo de estas interacciones.
Teniendo en cuenta que ésta es una variable plenamente controlable, obliga a pensar que la acción conjunta sobre los padres –enseñándoles a ejecutar estas respuestas y esta conducta comunicativa– y sobre los hijos –enseñándoles a mantener su atención y animándoles a expresarse– ha de conseguir un efecto sinérgico sobre el desarrollo del lenguaje.
La acción pedagógica sobre los padres es, pues, importante ya que no todos poseen espontáneamente la misma capacidad comunicadora o la misma voluntad de interacción con sus hijos, y menos con un hijo que no se presta a intercambiar su diálogo. Por ello es bueno que tengan acceso a una formación más o menos sistemática, a través de la acción pedagógica de los logopedas y de libros que ofrecen ejemplos significativos. Es recomendable en este sentido el libro de Marta Gracia, titulado “Comunicación y lenguaje en primeras edades: Intervención con familias”, de la editorial Milenio, que encontrarán citado y comentado en este Portal.
También son recomendables la orientación y normas que se dan en el artículo de este Portal titulado “Mejorar la comunicación de las personas con síndrome de Down”, de los Dres. Miller, Leavitt y Leddy, en donde se ofrece a las familias buenas estrategias para seguir en su interacción comunicativa con el niño.