Artículo: Programación educativa para escolares III
Programación educativa para escolares con síndrome de Down
Emilio Ruiz Rodríguez
TERCERA PARTE
CAPÍTULO I
EL PROCESO DE ENSEÑANZA – APRENDIZAJE
(Continuación)
4. LA RELACIÓN ENTRE EL PROFESOR Y EL ALUMNO CON SÍNDROME DE DOWN: MEDIDAS PARA APLICAR EN EL AULA
Respecto a la relación entre el profesor y el alumno con síndrome de Down, nuevamente nos serviremos de los conocimientos con los que contamos respecto a las peculiaridades de su aprendizaje, para establecer las pautas más adecuadas de intervención en el aula.
De entrada, lo fundamental es que el alumno con síndrome de Down disfrute de los mismos derechos y cumpla los mismos deberes que los demás, que sea uno más, de forma que se le trate como a los otros, sin tener más obligaciones pero tampoco contando con más privilegios. Si hubiéramos de inclinar la balanza por un extremo, quizás elegiríamos caer por el lado de la exigencia más que por el de la sobreprotección. Por ello, es recomendable, dentro del marco del aula, considerar los siguientes principios (Ruiz 2007a; 2009a):
- La acogida del alumno con síndrome de Down en la clase se puede facilitar con una breve charla previa a los compañeros, explicándoles algunas de sus características y dándoles sugerencias sobre cómo tratarle; por ejemplo, recordándoles que no han de ayudarle cuando no sea necesario.
- Se ha de tener en cuenta que en muchas ocasiones la actitud que van a mostrar los demás niños hacia el niño con síndrome de Down será la que el profesor transmita. En general los alumnos lo acogerán con naturalidad, ya que suelen tener menos ideas preconcebidas respecto a lo que el síndrome de Down supone.
- En lo relacionado con los compañeros, la mejor estrategia es abordar el tema con normalidad y responder a sus dudas con naturalidad. Lo esencial es el trato que el profesor proporcione al alumno con síndrome de Down, pues sus compañeros actuarán de un modo semejante. Si el profesor se siente incómodo, o inseguro, o trata de forma sobreprotectora al niño con síndrome de Down muy probablemente ese será el trato que le prodiguen sus compañeros de clase. De ahí la importancia de cuidar los aspectos de relación personal: clima de clase, nivel de ayuda, trato correcto y relajado, habilidades sociales, etc.
- Es útil crear la figura del alumno tutor o compañero de acogida, válido para cualquier alumno nuevo que se incorpore al aula, por ejemplo inmigrante o con síndrome de Down, que le acompañará y ayudará durante los primeros días.
- Establecer momentos en las clases en que se realicen ayudas mutuas entre iguales, buscando compañeros que apoyen al alumno y le ayuden con sus tareas. Se ha de intentar evitar, no obstante, cargar a otro niño con la responsabilidad de la atención del niño con síndrome de Down.
- La tradicional norma escolar que afirma que “no se puede copiar” debería sustituirse por otra que obligase a hacerlo en determinadas circunstancias. Si el objetivo final es el aprendizaje de todos los alumnos, en muchas ocasiones una breve explicación o modelado de un compañero es más efectivo que todos los esfuerzos docentes del profesor.
- Siempre que se pueda, procurar que el alumno con síndrome de Down realice actividades en común con los demás, procurando que lleve los mismos libros, que tenga el mismo boletín de notas, que comparta el mayor número posible de clases con ellos.
- Realizar un seguimiento individual del alumno, analizando su proceso educativo, reconociendo sus avances, revisando con frecuencia su trabajo y sus tareas, a ser posible cada día.
- Favorecer la realización de actividades controladas de forma individual por el profesor, teniendo previstos momentos para llevar a cabo supervisiones y ayudas en relación con los aspectos concretos en que tiene dificultades.
- Elaborar una carpeta individual con actividades de espera, de refuerzo o ampliación para el alumno con síndrome de Down. Un objetivo esencial de la planificación del aula ha de ser la autonomía del niño en clase, de forma que sea capaz de realizar sus tareas por sí mismo, como cualquier compañero.
- Utilizar los puntos fuertes de las personas con síndrome de Down para mejorar su aprendizaje. Emplear una enseñanza basada en imágenes y objetos, con apoyo visual para mejorar la memorización y aplicación práctica en situaciones reales de los contenidos trabajados. Por ejemplo, es muy útil confeccionar un panel con imágenes con el horario del alumno, para que sepa en cada momento la actividad que se va a realizar en clase o pictogramas por los espacios del centro para facilitar su orientación espacial
- El aprendizaje por medio de modelos o por observación es característica destacada en las personas con síndrome de Down. Por eso se ha de permitir que el alumno se fije en los demás, que los tome como referencia antes o durante la actividad.
- Tener en cuenta también sus puntos débiles, por ejemplo, limitando las exposiciones verbales en clase, reduciendo las exigencias de expresión oral o adaptando las explicaciones y las tareas a los límites de su atención.
- Si el alumno con síndrome de Down tiene dificultades para captar la información por vía auditiva, se han de tomar medidas que compensen esa limitación como:
- Hablar al niño comprobando que nos atiende, mirándole a la cara y transmitiéndole mensajes directos, cortos, concisos y sin doble sentido.
- Colocarle en la parte delantera de la clase, tanto para facilitar el control de su atención como por sus probables deficiencias visuales, que pueden hacer que le cueste percibir lo que aparece en la pizarra.
- Reforzar las exposiciones, las instrucciones y las órdenes verbales con expresiones faciales, señales o gestos, e incluso guía física si es necesario.
- Escribir las palabras clave y el vocabulario nuevo en la pizarra.
- Conceder tiempo suficiente al niño con síndrome de Down para que procese la información que se le proporciona y pueda responder, respetando la lentitud de su respuesta.
- En la relación con las familias, es muy útil para el intercambio frecuente de información y la coordinación de la intervención educativa, la utilización de un cuaderno compartido, denominado en algunos casos “cuaderno viajero”, “agenda personal” o “cuaderno individual del alumno”.
Es posible, por último, que el alumno reciba algún tipo de apoyo complementario en un aula distinta, apartada de sus compañeros, en sesiones individualizadas con profesores especialistas, por ejemplo, de pedagogía terapéutica, logopedia o fisioterapia. Las sesiones de apoyo fuera del aula tienen un inconveniente claro, ya que privan al alumno de asistir a las enseñanzas que en esos momentos se están impartiendo en la clase, lo que sobrecarga al niño, que deberá recuperar esos contenidos en otro momento. Se ha de procurar, por tanto, que el número de horas que permanezca fuera de la clase sea el menor posible. Por otro lado, algunas medidas de coordinación entre el aula ordinaria y el aula de apoyo pueden ser las siguientes:
- Programar reuniones de coordinación y planificación conjunta de los distintos profesionales que trabajan con el niño de forma periódica.
- Elaborar una carpeta individual para el alumno con síndrome de Down, que llevará siempre con él y en la que estará recogida su adaptación curricular y los materiales con las actividades que está realizando, tanto en el aula ordinaria como en la de apoyo. Podría incluso llevar la carpeta fuera del colegio y trabajar algunos aspectos en casa o en la asociación a la que asista.
- Emplear la agenda o cuaderno viajero como herramienta de comunicación entre todos los profesores y con la familia
- Diseñar una hoja individual de cada alumno con síndrome de Down, con los objetivos, contenidos y actividades para él programadas para un plazo determinado de tiempo, por ejemplo, dos semanas. Se trataría de un breve resumen de su Adaptación Curricular Individual que puede servir como referencia en su tarea al maestro en el aula y al especialista en el apoyo.
- Realizar de forma regular intervenciones coordinadas y simultáneas de los dos profesionales, tutor y maestro de apoyo, con el grupo dentro del aula, para apoyar al alumno con síndrome de Down o a otros compañeros.
- Las estrategias cabeza-cola para abordar los distintos temas suelen ser muy efectivas. Antes de comenzar la lección, en el apoyo individual, se trabajan algunos de los conceptos fundamentales para que cuando se trate el tema, sepa de qué se está hablando. Al terminar se refuerzan también individualmente aquellos contenidos más complejos o abstractos.
- Las mismas fichas de trabajo utilizadas en el apoyo individual por el alumno con síndrome de Down pueden ser duplicadas y llevadas a clase para favorecer su trabajo autónomo.
BIBLIOGRAFÍA
- Buckley, S.; Bird, G.; Sacks, B., Alton, S., Mackinnon, C., Beadman, J. y Perera, J. Educación, acceso al currículum, lectura y escritura para alumnos con síndrome de Down. Síndrome de Down: Temas educativos. CEPE. Madrid 2006
- Fidler, D.J. La aparición de un perfil de personalidad, específico de síndrome, en los niños pequeños con síndrome de Down. Down Syndrome Research and Practice 10 (2):53-60, 2006. Revista Virtual Canal Down21. Resumen del mes. Septiembre 2006.
- Fidler, D.J. y Nadel, L. Education in children with Down syndrome: Neuroscience, development and intervention. Ment Retard Develop Disabil Res Rev 13: 262-271, 2007.
- Flórez, J. y Cabezas, D. Funciones ejecutivas en las personas con síndrome de Down: dificultades y posibilidades de entrenamiento. Síndrome de Down: Vida adulta 2: 78-82, 2010.
- Flórez, J. y Ruiz, E. Síndrome de Down. En: Síndromes y apoyos. Panorámica desde la ciencia y desde las asociaciones. FEAPS, Madrid 2006, p. 47-75.
- Flórez, J. y Ruiz, E. Características psicológicas y evolutivas de las personas adultas con síndrome de Down. Síndrome de Down: Vida adulta 1: 36-44, 2009.
- LOE. Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación. (BOE 4-5-2006)
- Molina, S. Variables intervinientes en la integración escolar de los alumnos con síndrome de Down: Un análisis metaevaluativo. En: Educar para la vida. I Congreso Nacional de Educación para personas con síndrome de Down. Publicaciones Obra Social y Cultural CajaSur. Córdoba 2003
- OCDE. Definition and Selection of Competencies (DeSeCo): Theoretical and Conceptual Foundation. (2002)
- Ruiz, E. Adaptaciones curriculares individuales para alumnos con síndrome de Down. Revista Síndrome de Down 20: 2-11, 2003. En: http://www.downcantabria.com/articuloE8.htm
- Ruiz, E. La integración escolar de los niños con síndrome de Down en España: algunas preguntas y respuestas. Revista Síndrome de Down 21: 122-133, 2004. En:http://www.downcantabria.com/revistapdf/83/122-133.pdf
- Ruiz, E. La transición entre etapas educativas de los alumnos con síndrome de Down. Revista Síndrome de Down 23: 2-13, 2006. En: http://www.downcantabria.com/revistapdf/88/2-14.pdf
- Ruiz, E. Integración educativa en el aula ordinaria con apoyos de los alumnos con síndrome de Down: sugerencias prácticas. Revista Síndrome de Down 24: 2-13, 2007a. En: http://www.downcantabria.com/revistapdf/92/2-13.pdf
- Ruiz, E. Escolarización: aspectos específicos en el síndrome de Down. I Jornada científica. Acciones individualizadas en el síndrome de Down. Fundación
- Iberoamericana Down21. Santander, 2007b.
- Ruiz, E. La función de la familia en la educación escolar de los alumnos con síndrome de Down. Revista Síndrome de Down 25: 6-16, 2008a. En: http://www.downcantabria.com/revistapdf/96/06-16.pdf
- Ruiz, E. La escolarización combinada, ¿una modalidad integradora? Boletín de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA). Septiembre 2008b.
- Ruiz, E. Evaluación de los alumnos con síndrome de Down. Revista Síndrome de Down 25: 151-164, 2008c. En: https://www.downcantabria.com/revistapdf/99/151-164.pdf
- Ruiz, E. Síndrome de Down: La etapa escolar. Guía para profesores y familias. Editorial CEPE. Madrid. 2009a. http://www.editorialcepe.es
- Ruiz, E. Maestro sombra. Boletín de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA). Marzo 2009b
- Ruiz, E. Características psicológicas de los alumnos con síndrome de Down. Curso básico sobre Síndrome de Down. Santander. Noviembre 2010a. En: http://www.downcantabria.com/curso4.htm
- Ruiz, E. Programación educativa e integración escolar de los alumnos con síndrome de Down. Curso básico sobre Síndrome de Down. Santander. Noviembre 2010b. En: http://www.downcantabria.com/curso12.htm
- Ruiz, E. Educación. Ping Pong con Emilio Ruiz. Boletín de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA). 22. nº 73: 4-12. Diciembre 2010
- Ruiz, E. Érase una vez … el síndrome de Down. CEPE. Madrid. 2010
- Schalock, R.L. y Verdugo, M.A. Calidad de vida. Manual para profesionales de la Educación, Salud y Servicios Sociales. Alianza Editorial. Madrid 2003
- Troncoso, M.V.; Del Cerro, M.; Soler, M. y Ruiz, E. Fundamentos y resultados de un método de lectura para alumnos con síndrome de Down. En: Síndrome de Down: biología, desarrollo y educación. Nuevas perspectivas. Flórez y col. (Dir.). Fundación Síndrome de Down de Cantabria. Fundación Marcelino Botín. Masson. Barcelona. Santander 1997
- Verdugo Alonso MA. De la segregación a la inclusión escolar. Revista Virtual Canal Down21. Artículo profesional, Enero 2004.