Resumen: Perfil clínico y principales comorbilidades en adultos
Perfil clínico y principales comorbilidades en adultos españoles con síndrome de Down
Clinical profiles and main comorbidities of Spanish adults with Down syndrome
Diego Real de Asúa, Miriam Quero, Fernando Moldenhauer, Carmen Suárez
European Journal of Internal Medicine 26: 385-391, 2015
RESUMEN
1. Introducción y métodos
El notable incremento en la esperanza de vida de las personas con síndrome de Down guarda estrecha relación con la atención médica prestada, especialmente en las áreas de la cirugía cardíaca, las infecciones, y la atención global dirigida por los programas de salud. El envejecimiento prematuro, sin embargo, sigue siendo un problema, y con ello se precisa saber los órganos que van siendo más afectados con la edad en esta población. El presente trabajo expone las características de salud de una población de adultos con síndrome de Down en Madrid (17 a 65 años), que acuden periódicamente al Servicio de adultos con síndrome de Down del Hospital Universitario de la Princesa. Los datos fueron recogidos en su primera visita.
El estudio fue transversal y se realizó en 144 personas (51% eran varones). Se obtuvieron datos generales de carácter demográfico, diversas variables antropométricas, y una revisión completa de: a) factores de riesgo cardiovascular incluidos los antecedentes, parámetros metabólicos (lípidos, glucemia, hiperuricemia, síndrome metabólico, tabaco, etc.); b) trastornos oftalmológicos; c) trastornos otorrinolaringológicos; d) trastornos dermatológicos; e) trastornos tiroideos; f) trastornos cardíacos; g) trastornos neurológicos; h) trastornos psiquiátricos; i) trastornos osteomusculares; j) trastornos gastrointestinales. Se registró la medicación consumida, y se les sometió a una analítica sanguínea completa.
2. Resultados
Los principales datos quedan expuestos en la siguiente tabla.
Tabla. Principales comorbilidades clínicas de adultos con síndrome de Down
Comorbilidad |
Total (n=144) |
Menos de 30 (n=54) |
30-39 (n=44) |
40-49 (n=23) |
Más de 50 (n=23) |
p |
Media de comorbilidades |
5,0±2,1 |
4,6±2,0 |
4,8±2,0 |
5,4±2,6 |
5,6±2,6 |
ns |
Oftalmología |
117 (81%) |
39 (72%) |
35 (80%) |
22 (96%) |
21 (91%) |
0,054 |
Cataratas |
45 (31%) |
8 (15%) |
12 (27%) |
11(48%) |
14 (61%) |
<0,001 |
Keratocono |
10 (7%) |
0 |
5 (11%9 |
1 (4%) |
4 (17%) |
<0,05 |
Trastornos de refracción |
97 (67%) |
36 (67%) |
29 (66%) |
18 (78%) |
14 (61%) |
Ns |
ORL |
53 (37%) |
19 (35%) |
16 (36%) |
10 (43%) |
8 (35%) |
Ns |
Tapones de oído recurrentes |
27 (19%) |
6 (11%) |
10 (23%) |
6 (26%) |
5 (22%) |
Ns |
Otitis media recurr. |
19 (13%) |
12 (22%) |
4 (9%) |
2 (9%) |
1 (4%) |
Ns |
Amigdalectomía |
23 (16%) |
7 (13%) |
8 (18%) |
6 (26%) |
2 (9%) |
Ns |
Adenoidectomía |
25 (17%) |
15 (28%) |
8 (18%) |
2 (9%) |
0 |
<0,05 |
Piel |
86 (60%) |
35 (65%) |
26 (59%) |
15 (66%) |
10 (43%) |
Ns |
Dermatitis seborreica |
32 (22%) |
13 (20%) |
11 (25%) |
5 (22%) |
5 (22%) |
Ns |
Alopecia areata |
10 (7%) |
2 (4%) |
4 (9%) |
3 (13%) |
1 (4%) |
Ns |
Acné |
3 (2%) |
2 (4%) |
1 (2%) |
0 |
0 |
Ns |
Foliculitis recurrente |
25 (17%) |
12 (22%) |
8 (18%) |
4 (17%) |
1 (4%) |
Ns |
Tiroides |
81 (56%) |
26 (48%) |
28 (64%) |
13 (57%) |
14 (61%) |
Ns |
Hipotiroidismo |
75 (52%) |
23 (43%) |
25 (57%) |
13 (57%) |
14 (61%) |
Ns |
Hipertiroidismo |
6 (4%) |
3 (6%) |
3 (7%) |
0 |
0 |
Ns |
Cardiopatía congénita |
45 (31%) |
27 (50%) |
10 (23%) |
5 (22%) |
3 (13%) |
<0,01 |
Corrección quirúrgica |
29 (20%) |
21 (39%) |
6 (14) |
2 (9%) |
0 |
<0,001 |
SNC |
18 (12,5%) |
1 (2%) |
1 (2%) |
4 (17%) |
12 (52%) |
<0,001 |
Demencia |
14 (10%) |
0 |
0 |
3 (13%) |
11(48%) |
<0,001 |
Convulsiones |
11 (8%) |
1(2%) |
1 (2%) |
3 (13%) |
6 (26%) |
<0,001 |
Psiquiatría |
58 (40%) |
17 (31%) |
18 (41%) |
11 (48%) |
12 (52%) |
Ns |
Ansiedad |
13 (9%) |
6 (11%) |
2 (5%) |
2 (9%) |
3 (13%) |
Ns |
Depresión |
37 (26%) |
10 (18%) |
11 (25%) |
7 (30%) |
9 (39%) |
Ns |
Agresividad |
15 (10%) |
4 (7%) |
6 (14%) |
2 (9%) |
3 (13%) |
Ns |
Rutina obstinada |
13 (9%) |
4 (7%) |
5 (11%) |
1 (4%) |
3 (13%) |
Ns |
Osteomuscular |
25 (17%) |
10 (18%) |
5 (11%) |
3 (13%) |
7 (30%) |
Ns |
Osteoartritis |
5 (3%) |
0 |
2 (5%) |
1 (4%) |
2 (9%) |
Ns |
Subluxación atloaxoidea |
7 (5%) |
6 (11%) |
1 (2%) |
0 |
0 |
0,056 |
Hallus valgus |
10 (7%) |
1 (2%) |
3 (7%) |
2 (9%) |
4 (17%) |
Ns |
Gastrointestinal |
73 (57%) |
40 |
24 (54%) |
12 (52%) |
10 (43%) |
<0,05 |
Enfermedad celíaca |
11 (8%) |
7 (13%) |
1 (2%) |
2 (9%) |
1 (4%) |
Ns |
Reflujo gastroesofágico |
20 (14%) |
7 (13%) |
8 (18%) |
3 (13%) |
2 (9%) |
Ns |
Estreñimiento |
48 (33%) |
16 (30%) |
15 (34%) |
9 (39%) |
8 (35%) |
Ns |
Hepatitis B crónica |
7 (5%) |
0 |
4 (9%) |
1 (4%) |
2 (9%) |
Ns |
En la tabla se aprecian los datos concretos y la evolución a lo largo de la edad. Los trastornos más frecuentes fueron en las áreas de la visión, piel, tiroides, gastrointestinal y psicopatología.
De los 144 adultos, 112 vivían con sus padres; el porcentaje fue disminuyendo con la edad y en cambio fue aumentando el de quienes pasaron a centros residenciales. La misma tendencia se notó en los padres como cuidadores, que disminuyó con la edad y aumentó el porcentaje de hermanos u otros cuidadores que atendían. Los porcentajes de empleo fueron también mayores en las edades más jóvenes.
La mayoría tenía sobre peso u obesidad. La dislipidemia fue más frecuente conforme aumentaba la edad. Ninguno mostró hipertensión arterial.
La medicación más frecuente fue la levotiroxina (48,6%), la vitamina D (34,7%), los antidepresivos ·2,2%) y los antipsicóticos (31,2%).
3. Discusión
Los resultados muestran dos poblaciones de adultos con síndrome de Down netamente diferentes. Por un lado, los menores de 30 años han recibido probablemente mejor atención global en su niñez, siguiendo protocolos clínicos más actualizados y completos, con mejores seguimientos a las guías específicas de salud y mejor detección de distintas condiciones y apoyo psicosocial. Por otro lado, los de mayor edad recibieron menor atención especializada. Se aprecian signos de envejecimiento precoz como pueden ser las cataratas, la demencia o los trastornos osteomusculares. Es de destacar la ausencia de problemas cardiovasculares que en la población normal acompañan siempre al envejecimiento, a pesar de que en los adultos con síndrome de Down existen factores predisponentes: la obesidad, falta de ejercicio, etc. Sin embargo, como ya se ha demostrado en otros trabajos, su presión arterial se mantiene normal y es escaso el tono simpático.
COMENTARIO
Se confirma la prevalencia de problemas médicos en la población adulta con síndrome de Down. Los datos que proporciona el trabajo marcan la línea de seguimiento que debe realizarse, y la necesidad de que existan clínicas especializadas de adultos para conseguir el mejor estado posible, dada su tendencia a iniciar antes el envejecimiento. Sin duda, el buen seguimiento clínico de estas personas ayuda a mantener un buen estado de salud que repercute en su calidad de vida. Los diversos factores psicosociales, muchos de los cuales dependen de una buena preparación durante la juventud, contribuyen igualmente a conseguir el mejor estado de salud integral y la realización de una vida plena.